.

El niño que busco ser...

Cuando yo era niño, hablaba como niño, pensaba como niño, razonaba como niño; pero cuando llegué a ser hombre, dejé las cosas de niño. Saulo de Tarso

Cuenta una historia que alguna vez, un religioso encontró a 3 niños jugando. Se acercó a ellos y les hizo una pregunta para analizar sus reacciones:

_Niños, que harían si supieran que el mundo se va a acabar en 3 horas??

El primer niño se apresuró a responder de forma muy seria:

_Yo correría a mi casa y abrazaría a mis hermanos y besaría a mis papás... les diría que los quiero muchísimo.

Era una muy buena respuesta. Sin duda el niño sabía sus prioridades en la vida y no dudó en responder. El segundo niño entonces respondió algo preocupado:

_Yo correría a la iglesia y me postraría para pedir perdon por mis travesuras y a ponerme en paz con Dios.

Esta respuesta asombró al religioso y lo hizo darse cuenta de que el niño ya tenía idea de sus travesuras y de que necesitaba buscar a Dios; tal respuesta era difícil de superar...

El tercer niño, casi no había puesto atención a la pregunta, sin embargo respondió sin dejar de mirar el montón de arena que cargaba en su camioncito...

_Yo?... yo seguría jugando!

Este niño, en su inocencia, sabe quién es, no le urge demostrar afecto porque sabe que lo ha hecho a tiempo ni tampoco le asusta encontrarse con Dios porque sabe que ya está justificado ante Él, simplemente espera que lo encuentren haciendo lo que un niño debe hacer: jugar.

Caramba, ese es el niño que quiero ser!!!

0 comentarios:

Publicar un comentario