El super héroe que si existe!

A caminar y correr... andar en bicicleta, leer, escribir.... a jugar con los números y con las ideas... a defender mis convicciones y a reconocer mis errores; me enseñaste a adaptarme y a buscar mi propia realidad.

Te has desvivido por hacerme mejor que tú pero la paradoja es que aún me falta para alcanzarte los talones. Estoy siguiendo tus huellas y aunque de tí he aprendido mucho más que de cualquier enciclopedia, todavía sigues dándome lecciones.

Hay mucho de lo que eres y que yo no quiero repetir, pero son más las cosas que admiro y tengo como guía para que cuando yo me encuentre en tus zapatos, pueda recordar con orgullo que soy mucho de lo que tu eres.

Gracias Papá, por ser el único de mis super héroes que si existe!